Como es bien conocido, la civilización sumeria es una de las más antiguas civilizaciones de la humanidad de la cual se tenga noticia, cuyo origen está envuelto en el misterio. Se asentaron en la Mesopotamia hace unos 5.000 años aproximadamente y sobre ellos reside el mérito de ser los primeros en desarrollar la escritura. Los sumerios fueron buenos observadores y como consecuencia de ello formularon teorías astronómicas muy avanzadas para su época. Las imágenes arqueológicas que se han encontrado así lo atestiguan, pero si algo por lo que resultan especialmente llamativos es por su posible contacto con civilizaciones extraterrestres. Así como lo lee. Sería algo que explicaría sus avanzados conocimientos de astronomía, como representar el sistema solar tal como hoy lo conocemos. Y es que varios especialistas han sostenido que para haber obtenido tan avanzada sabiduría, esta pudo haber sido posible debido a una raza alienígena el cual podría haberles transmitido tales conocimientos, impensables para su época ya que pasarían varios siglos para alcanzar algo similar en algunos aspectos. En este sentido, son bien conocidos los Anunnaki, un grupo de deidades sumerias que aparentemente vendrían a ser seres semi-extraterrestres, enviados desde un planeta desconocido a la Tierra, del cual se dice que procedería una raza muy avanzada que ayudaron a los sumerios en el desarrollo de su civilización. Ante todo es bueno aclarar que lo que de ellos sabemos aparece escrito en unas tabllllas cuneiformes encontradas en la Biblioteca de Asurbanipal en Ninive y que hoy se conservan en el British Museum. No es un producto de la imaginación como algunos puedan pensar.Los Anunnaki eran vistos por los humanos como dioses, ya que eran inteligentes, poseían grandes conocimientos y una avanzada tecnología, así como una gran longevidad, pero eran mortales. Según una interpretación de las tablillas donde se habla de esos extraños seres, los Anunnaki, eran una raza avanzada de extraterrestres, que se originaron en los exteriores de nuestro Sistema Solar. Como sabéis, los sumerios sostenían que existe un planeta más en nuestro sistema solar, llamado Nibiru (no descubierto científicamente hasta hoy) del cual se dice que tiene una órbita elíptica similar a la de un cometa y que tarda 3600 años en dar una vuelta completa alrededor del sol. Varios cilindros sumerios como el famoso VA/243 describen este planeta como uno que tiene una órbita más allá de Plutón y de un color rojo intenso, mucho más grande que la Tierra y cualquier otro cuerpo del sistema solar. La descripción sumeria del Sistema Solar de 6000 años de antigüedad, incluye al misterioso Nibiru, que quiere decir "planeta del cruce". El nombre sale de una leyenda, en donde se supone que en el pasado Nibiru cruzó la órbita de la Tierra y colisionaron, generando la órbita altamente elíptica de Nibiru y el cinturón de asteroides. Las anomalías detectadas con el nuevo planeta entre la Tierra y Júpiter, y la extraña ubicación de Plutón (hoy degradado a su condición de planeta enano) corresponderían a la irrupción cada 3.600 años de un desconocido planeta extrasolar que en sus orígenes desvió la órbita de Plutón a su actual posición y que chocó seguidamente con un planeta situado donde se encuentra el cinturón de asteroides, que serían los restos de esa colisión. Hoy en día, son muchos los científicos que apoyan esta teoría. En la antigüedad, la gente no solo esperaba el regreso periódico de Nibiru (denominado por los antiguos griegos como Hercólubus), si no que trazaron su movimiento en el cielo con la esperanza de que a su retorno - del cual se dice que ocurrirá a finales del 2012 - la humanidad entraría en una nueva era. ¿Y que paso con los Anunnakis? Sucedió que un día decidieron regresar a su mundo para no volver jamás, tal como sucedió con los "visitantes" a otros pueblos de la antigüedad y que se desvanecieron sin dejar rastro. Sea cierto o no la historia de los Annunakis, su desaparición es uno de los secretos mas controvertidos de la historia.
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